domingo, 21 de octubre de 2012


Prometheus (2012), la esperada precuela de ALIEN (1979), dirigida por Ridley Scott y enmarcada dentro de esa fiebre por recuperar franquicias que tuvieron éxito o que a día de hoy poseen algún tipo de “culto”. El “invento” se puede resumir de la siguiente forma:

Sinopsis:
En un momento del futuro, alguien descubre una conexión de la humanidad hacia más allá de las estrellas, con la creencia de que nuestros verdaderos “padres” nos colonizaron hace más de 35.000 años. Nosotros, sus hijos, ahora queremos respuestas y se pone en marcha una expedición científica de la cual nadie tiene seguro volver.  Una vez en el planeta se sucederán los hallazgos, pero el más importante de todos es que tal vez lo que encuentren allí no sea realmente lo que esperaban.


Así lo ve Jeanbomn: 



Comentario:
En un momento del futuro, alguien descubre una conexión de la humanidad hacia más allá de las estrellas… vale. La idea de que el ser humano proviene o es “hijo” de unos habitantes estelares vuelve a ser el leiv motif de un argumento que pretende que nos hagamos las preguntas del millón… otra vez: ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿Por qué estamos aquí? ¿Qué queremos ser de mayor?; así que una empresa controlada por un señor muy mayor financia una expedición hacia el infinito y más allá en una secuencia que me hizo recordar a Parque Jurásico (por lo de la misión en busca del conocimiento y el filántropo que pone el dinero y los medios), en una secuencia en la que ya vas captando cómo son los personajes de la película: ninguno tan destacable como David, el androide, y aun así… porque hay un androide, el cual, ¡sorpresa! Oculta un programa secreto que debe guardar a la tripulación, pero no temáis, en aras de que parezca un sabelotodo de vez en cuando los guionistas hacen que se vanaglorie y alardee de saber todo aquello que los demás no saben, desde luego, algo muy conseguido para darnos a entender que NO tiene emociones. La película no sólo es un pobre panfleto de pseudfilosofía New Age y Trans-humanista, sino que además pone a filosofar a unos personajes que minutos antes han actuado como rompetechos. Increíble. Que no os engañen, Prometheus sigue la senda de desdichas tales como Minority Report o Yo Robot. Hablamos de cine de acción disfrazado de sci-fi. Me encanta la ciencia ficción, salid corriendo a ver Moon que esa sí que merece la pena: (http://elexploradorcinefilo.blogspot.com.es/2012_06_21_archive.html) Además, Prometheus no concluye, es el primer acto de una serie de tres (seguramente tres), con lo que aparte de que vais a constatar multitud de cabos sueltos, la naturaleza de los mismos es tan banal y predecible que os quedareis con la boca abierta, pero de la risa o el bostezo.

A favor: Los efectos especiales. Que la protagonista acabe siendo una “madre coraje” como en la saga original. La idea de que esta pueda ser la más potable o entretenida de la nueva franquicia.

En contra: Recuerda a cosas que ya has visto muchas veces y que te habías atrevido a olvidar. Alguien me puso una escena de Mision a marte (2000) que parece que han plagiado en esta. Damon Lindelof, el guonista, responsable de ese engendro llamado Lost. Se llama Prometheus, pero del mito griego, ná de ná, salvo que nos crearon. Dado que ya existe un video donde revelan casi todos los fallos y ridiculeces de la película (os animo a que juguéis a detectar otros, hay más ), no insistiré en este apartado. Clicad en el enlace y os reiréis un poco…


 

2 comentarios:

  1. Estimado José Raúl, no puedo dejar de encontrarte la razón sobre lo inevitable… Por la misma razón, es que uno absurdamente sigue viendo estos reciclajes dignos de un estudio antropológico no por su contenido, sino más bien, por su obsesiva reiteración. Con ello, no quiero subrayar el terreno del cine de culto necesariamente, pero sin lugar a dudas, hay ciertas simplicidades caricaturescas que se vuelven a reiterar una y otra vez. Pareciera una suerte de hipnosis a largo plazo con distintas opciones de menú, quiere un poco de esto con un poco de esto otro, etc., etc.

    A mi juicio es un cine tipo parche así como las soluciones parche a las cuales nos estamos habituando actualmente en la contingencia mundial!!!

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    1. Exacto, desde luego el problema actual sobre los tópicos es un tema preocupante. A lo mejor lo que ocurre es que a veces una excesiva información, de manera tan repentina, nos satura y nos aburre. No hay tiempo para digerir, y todo influye en la producción cinematográfica, se quiere contentar a todo el mundo y al final no se contenta a nadie porque el objetivo era el dinero, desde un principio.

      Un amigo la vió en el cine y los espectadores de al lado (jóvenes) llegaron a afirmar sorprendidos: "Hey, esto se parece a Alien"

      Y eso era lo que encontraron diferente, el calco. Se parece, porque ni siquiera es. Y es bueno que se dieran cuenta, lo que les parecía diferente al Alien original era precísamente que Prometheus compartía demasiado bien las reiteraciones actuales que tú indicas, Alexander. Se les cambia el rostro, pero el esqueleto es el mismo.

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